Fenómenos Mecánicos del Ciclo Cardiaco.
FENÓMENOS AL FINAL DE LA DIÁSTOLE
Hacia el final de la diástole, las válvulas mitral (bicúspide) y tricúspide entre las aurículas y los ventrículos se abren, y las válvulas aórtica y pulmonar se cierran. La sangre fluye hacia el corazón durante toda la diástole y llena tanto las aurículas como los ventrículos. El ritmo de llenado disminuye conforme los ventrículos se distienden; en especial cuando la frecuencia cardiaca es baja, las cúspides de las válvulas auriculoventriculares se mueven a la posición cerrada. La presión de los ventrículos permanece baja. Cerca de 70% del llenado ventricular ocurre de forma pasiva durante la diástole.
SÍSTOLE AURICULAR
La contracción de las aurículas impulsa sangre adicional hacia los ventrículos. La contracción del músculo auricular estrecha los orificios de las venas cava superior, cava inferior y pulmonares, y la inercia de la sangre que se desplaza hacia el corazón tiende a mantener la sangre en él. Sin embargo, a pesar de estas influencias inhibidoras, existe algún reflujo de sangre a las venas.
SÍSTOLE VENTRICULAR
Al principio de la sístole ventricular, las válvulas auriculoventriculares se cierran. Al principio el músculo ventricular se acorta relativamente poco, pero la presión intraventricular se eleva mucho conforme el miocardio oprime la sangre que está dentro del ventrículo. Este periodo de contracción ventricular isovolumétrica (isométrica) dura cerca de 0.05 s, hasta que la presión de los ventrículos izquierdo y derecho rebasa las presiones de la aorta (80 mmHg, 10.6 kPa) y de la arteria pulmonar (10 mmHg), con lo cual las válvulas aórtica y pulmonar se abren. Durante la contracción isovolumétrica, las válvulas auriculoventriculares se abultan hacia las aurículas.
Cuando las válvulas aórtica y pulmonar se abren, inicia la fase de expulsión ventricular. La presión intraventricular aumenta al máximo y luego se reduce un poco antes del final de la sístole ventricular. Las presiones máximas ventriculares son 120 mmHg en el ventrículo izquierdo y 25 mmHg en el derecho. Al final de la sístole, la presión aórtica en realidad rebasa la del ventrículo izquierdo, pero por un corto periodo, el momento (momentum) conserva el movimiento de avance de la sangre. La contracción del músculo ventricular tira de las válvulas auriculoventriculares hacia abajo y la presión auricular desciende. La cantidad de sangre expulsada por cada ventrículo por latido en reposo es de 70 a 90 ml. El volumen ventricular al final de la diástole es cercano a 130 ml. Por tanto, casi 50 ml de sangre permanece en cada ventrículo al final de la sístole (volumen ventricular al final de la sístole) y la fracción de expulsión, el porcentaje del volumen ventricular al final de la diástole que se expulsa con cada latido, es cercano a 65%.
DIÁSTOLE TEMPRANA
Una vez que el músculo ventricular se contrae por completo, las presiones ventriculares que iban en descenso, caen con más rapidez. Éste es el periodo de protodiástole, el cual dura unos 0.04 s y termina cuando se rebasa el momento (momentum) de la sangre expulsada; entonces, se cierran las válvulas aórtica y pulmonar. Después del cierre valvular, la presión continúa en descenso rápido durante el periodo de relajación ventricular isovolumétrica. Esta relajación isovolumétrica termina cuando la presión ventricular desciende por debajo de la presión auricular y las válvulas auriculoventriculares se abren, lo cual permite que los ventrículos se llenen.
PERICARDIO
El miocardio está cubierto por una capa fibrosa conocida como epicardio. A su vez este último está rodeado por el pericardio, el cual separa al corazón del resto de las vísceras torácicas. El espacio entre el epicardio y el pericardio (el saco pericárdico) contiene 5 a 30 ml de líquido claro que lubrica al corazón y le permite contraerse con la mínima fricción.
DURACIÓN DE LA SÍSTOLE Y LA DIÁSTOLE
El músculo cardiaco tiene la propiedad única de contraerse y repolarizarse más rápido cuando la frecuencia cardiaca es alta y la duración de la sístole disminuye de 0.27 s en una frecuencia cardiaca de 65 hasta 0.16 s cuando la frecuencia cardiaca es de 200 latidos por minuto. El acortamiento se debe sobre todo a la menor duración de la expulsión sistólica. Dado que la mayor parte del llenado ventricular tiene lugar en la diástole, con una frecuencia cardiaca cercana a 180, el llenado es adecuado, siempre que el retorno nincremento en la frecuencia.
La sístole electromecánica total es el periodo desde el inicio del complejo QRS hasta el cierre de las válvulas aórticas, determinado por el inicio del segundo ruido cardiaco. El tiempo de expulsión ventricular izquierda corresponde al periodo desde el principio del incremento en la presión carotídea hasta la muesca dicrótica.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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